Si hay un adjetivo que nos define, es que somos auténticos Sunset Lovers. En cada viaje, buscamos el lugar perfecto para contemplar la puesta de sol y dejar que las últimas luces del día se derramen suavemente sobre las casas, el campo o el mar.
Lisboa es, sin duda, uno de los mejores destinos para disfrutar de un atardecer inolvidable. Gracias a sus colinas y desniveles, la ciudad ofrece miradores espectaculares desde los que puedes disfrutar de una panorámica impresionante. Además, a lo largo de la orilla del estuario del Tajo, encontrarás jardines y rincones tranquilos que convierten cada atardecer en un momento mágico.
Después de cinco días intensos explorando cada rincón, aquí te dejo nuestras conclusiones sobre los mejores miradores de Lisboa para disfrutar del atardecer:
Mirador Nuestra Señora do Monte
Para mí, este es el mejor mirador de toda Lisboa. Aviso para aventureros: está situado en uno de los puntos más altos de la ciudad, así que si decides subir caminando, prepárate para una cuesta que puede hacerse un poco larga.
Pero, créeme, el esfuerzo vale cada paso. Desde aquí tendrás una vista panorámica impresionante de toda la zona de Chiado y Baixa, junto con la majestuosa Avenida de la Libertad. Además, podrás admirar las principales plazas del centro de la ciudad. Y como si fuera poco, el puente 25 de Abril, el Cristo Rey y el río Tajo completarán, junto con el Castillo de San Jorge, un telón de fondo espectacular.
Este mirador es una visita imprescindible si estás en Lisboa.
Este mirador nos sorprendió de manera totalmente inesperada.
A lo largo de nuestro viaje por Lisboa, el Castillo de San Jorge fue una presencia constante en el horizonte, pero no fuimos conscientes de las espectaculares vistas que ofrece hasta que llegamos a él.
Situado en uno de los puntos más altos de la ciudad, este mirador no solo te permite disfrutar de las vistas sobre Chiado y Baixa, sino también de la pintoresca Alfama y el hermoso estuario del Tajo. Desde las murallas del castillo, tendrás una perspectiva privilegiada, sin ningún edificio que interrumpa la panorámica.
El mejor lugar, sin duda, lo encontramos en unas escaleras en la muralla oeste, que descienden hasta una torre y ofrecen una vista impactante de la ciudad. Es el lugar perfecto para dejarte llevar por la magia de Lisboa y contemplar su belleza desde las alturas.
Mirador del Castillo de San Jorge
Puente 25 de Abril desde Jardim do Rio
Este mirador es quizá el más desconocido por los turistas, pero sin duda es uno de los más auténticos y locales. Se encuentra justo al otro lado del Tajo, en Almada, y aunque está algo más alejado del centro de Lisboa, llegar es muy fácil. Puedes tomar un Uber, Bolt, o incluso usar el transporte público.
Te prometo que la visita merece totalmente la pena. Desde aquí, disfrutarás del atardecer más largo, con una vista impresionante de toda la ciudad de Lisboa iluminada por los últimos rayos del sol. El ambiente es relajado y auténtico, ya que el jardín suele llenarse de locales, parejas o grupos de amigos que se reúnen para disfrutar del momento.
Lo más especial es que, muy a menudo, encontrarás a músicos tocando en vivo, lo que añade un toque mágico a la experiencia y convierte este mirador en uno de los mejores secretos de Lisboa.
Uno de los puntos más icónicos de la ciudad. Formado por una impresionante estructura de hierro forjado que se levanta imponente en la zona Baixa.
Desde el mirador puedes disfrutar especialmente de esta zona de la ciudad y de las principales plazas y monumentos que hay. Vale la pena subir al atardecer, porque encontraréis una luz increíble. Pero está rodeado todo el mirador por una malla que hace que las vistas no sean tan espectaculares como en otros miradores.
Se puede subir en el elevador, aunque hay que hacer varias horas de cola y hay que pagar. También se puede acceder andando y de manera gratuita, lo cual recomendamos totalmente.
Mirador de Santa Justa
Vistas de la zona Baixa desde el mirador
Este es uno de los miradores más conocidos de Lisboa, y por una buena razón. Situado junto a la Iglesia de Gracia y en una ubicación privilegiada dentro del barrio de Alfama, ofrece una vista impresionante del Castillo de San Jorge y la Plaza de Comercio, además de toda la zona de Baixa.
Desde este punto, podrás disfrutar de un atardecer espectacular que ilumina la ciudad en tonos dorados. A pesar de estar en lo alto, llegar es parte de la experiencia: puedes optar por tomar el icónico tranvía de Lisboa o subir en el funicular, lo que te ahorrará una caminata empinada y te permitirá disfrutar del paisaje sin esfuerzo.
Este mirador es perfecto para captar la esencia de Lisboa desde las alturas, ofreciendo una combinación de historia, belleza y comodidad que lo hacen imprescindible en tu visita a la ciudad.
Mirador de Gracia
Mirador de San Pedro de Alcántara
Este es otro de los miradores más famosos de Lisboa, con unas vistas espectaculares del Castillo de San Jorge y de la animada zona de Baixa. Su céntrica ubicación, justo al lado de la Plaza de los Restauradores, lo convierte en un lugar fácil de visitar y muy popular entre locales y turistas.
Lo que hace especial este mirador es el ambiente. Es común encontrar a músicos locales tocando en vivo, lo que añade un toque mágico al momento. Para llegar, puedes subir por la Calçada da Glória, ya sea caminando o tomando el pintoresco funicular. Nosotros te recomendamos hacer el recorrido a pie para disfrutar de las vistas mientras subes, y porque tendrás la oportunidad de sacar increíbles fotos del funicular ascendiendo por esta encantadora calle.
Este mirador es una parada imprescindible si buscas combinar paisajes, cultura y una experiencia auténtica en el corazón de Lisboa.
Este mirador, aunque visualmente es de los más bonitos de Lisboa, fue el que más nos decepcionó. Es cierto que los azulejos azules y las buganvilias que lo rodean le añaden un toque encantador, pero también es el más turístico y concurrido de todos.
Las vistas, aunque amplias, se centran principalmente en el río Tajo, sin muchos otros puntos de interés que destaquen. A pesar de esto, su excelente ubicación, a solo cinco minutos a pie de la Sé de Lisboa (la catedral), lo convierte en una parada rápida que merece la pena si ya te encuentras en la zona.
Es un lugar muy visitado por su belleza, pero si buscas una experiencia más tranquila o menos concurrida, quizás no sea el mejor mirador para disfrutar del atardecer.
Mirador de Santa Lucía
Mirador de Portas do Sol
Justo debajo del famoso Miradouro de Santa Lucía, encontramos este mirador por casualidad. Aunque no es el más sorprendente visualmente, lo que lo hace especial es que está mucho menos concurrido y ofrece vistas mejores y más amplias. Desde aquí, podrás disfrutar de una panorámica más completa de Alfama, además de puntos turísticos como la Iglesia de San Vicente y el Panteón Nacional.
Eso sí, ten en cuenta que no hay sombra en este mirador, así que si lo visitas en un día caluroso, te recomendaría no quedarte mucho tiempo. Aun así, es una excelente opción si buscas un lugar más tranquilo para disfrutar de las vistas.
Situado un poco alejado del centro, este mirador fue el que menos nos convenció de todos los que visitamos. A pesar de que el ambiente era local y tranquilo, y las vistas del Puente 25 de Abril y del Cristo Rei son realmente dignas de admirar, la ubicación lo deja un poco en desventaja.
Las vistas están dominadas por el puerto, lo que significa que no podrás disfrutar de las plazas o los monumentos más emblemáticos de Lisboa. Si bien es un lugar agradable para una escapada tranquila, si tu objetivo es ver los íconos de la ciudad, quizás debas considerar otros miradores más céntricos.
Mirador de Santa Catarina